Recuerdo a una maestra de la Universidad que no le gustaban los diminutivos ni apodos para las personas, yo creo que hay de apodos a apodos, pero ella siempre les hablaba a todas las personas por su nombre y le molestaba cuando los demás no lo hacían, un claro ejemplo era una amiga de nombre Erika que de cariño le llamábamos Kika, pero ella siempre la regañaba y le decía “Si tienes un nombre tan bonito como permites que te llamen Kika”, incluso le decía “Tus papás te pusieron tu nombre con tanto amor para que tu dejes que te pongan un apodo”, no creo que todos sean apodos, a mi me gustan mucho los cariños, de hecho los ocupo mucho, así que mi hijo no podía ser la excepción.
Para empezar le decimos Leonardo, su nombre, pero cuando me hace enojar, le digo “Leonardo Román”, el nombre completo, pero la mayoría de las veces le digo Leo, Leoncito, Leoncio, Románcito, aunque también me encanta decirle, Mi amor, mi vida y corazón, mi papá le dice Romano, sus primos le dicen Leonardito, también le hemos dicho gordo, gordito, pequeñito, cachorro, pero no tiene un cariño exclusivo, cuando era más pequeñito tenía un color más morenito parecido al de mi esposo, así que le decíamos frijolito o chocorrol, sus tíos en una ocasión quisieron llamarlo Lechibabi, porque siempre pedía mucha leche y tiraba mucha babita por eso de los dientes, pero no nos gusto. Ahora desde que le ponemos su traje de Flash y ya anda corriendo por toda la casa le decimos Flash-cito.
Sé que los apodos o sobrenombres pueden marcar a un niño, sé que debemos tener cuidado con la manera en que les hablamos y lo que les decimos, confieso que le he dicho que es súper inteligente, travieso y despistado, pero tengo mucho cuidado en no llamarle tonto, una sola ocasión le dije tontin, pero me arrepentí de inmediato.
Me gustan los nombres de cariño, me encanta que mis amigas identifiquen a sus pequeños de algún modo cariñoso, me gusta porque siento que te da más intimidad con la persona, tal vez todos te conozcan por tu nombre y tal vez te pongan muchos sobrenombres a lo largo de tu vida, pero hay cariñitos que se dicen en familia, como a mi hermanita que le decíamos Ratona de cariño y nadie lo sabía, nadie lo entendía, pero era un apodo-cariñito que le decíamos en familia, que sólo nosotros sabíamos y que me encanta compartir con ella, también hay apodos de amigos, de novios, de esposos y por supuesto de hijos, mi pequeño no tiene uno definido, el cariñito más socorrido hasta el momento es Leo. Si algún día le cambiamos de cariño ya les platicaré, por lo pronto es mi Leo, mi Leito, mi Leoncito, mi Leonardo.
(La foto fue jugando con los deditos de Leo cuando era bebé, en el Ipod touch, de ahí que no se vea tan bien editada, pero la guardamos de recuerdo con mucho cariño)
Está lleno de amor ese niño.. yo no veo nada de malo en los apodos. y menos si son tan lindos como los que has mencionado... Cariños
ResponderEliminar:D Que risa, tienes toda la razón, invertimos tanto tiempo buscandoles un nombre y terminamos llamándolos de mil formas distintas. Mi pequeña tiene más "apodos" que nadie en este mundo mundial.
ResponderEliminar-Bebecha (El Original)
-Ranita (Por Renata)
-Kittina (Por que lloraba como gatito cuando nació)
-Hamcita (Por que su papá y yo somos los Hamtaros)
-Cocotona (Migajita de Pan)
-Cachorrita (Su hermanito era Cachorrito de bebé)
Y los que se agreguen pronto, jeje. Que locos sus papitos.
Bechos !
a mi me gustan los apodos, siempre y cuando sean con amor y cariño y no para ofender.... a los niños mios les tenemos apodos tiernos: mi chinita, princesa, guaton, mamito, jejeje
ResponderEliminarLeonardo, ese el nombre que me gustaria ponerle a mi bebe si Dios me da la bendicion de tenerlo. Que le digas Leo o Leito a tu bebe no tiene nada de malo. Dios te bendiga y cuide a tu angelito.
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