domingo, 31 de julio de 2011

Nuestro amor por Toy Story...

No tengo la menor idea en donde radica nuestro gusto por "Toy Story"...

  • ¿¿Será la manera en que los juguetes toman vida??
  • ¿¿Será por la historia de amor de Andy hacia sus juguetes??
  • ¿¿Será por la amistad entre Woody y Buzz??
  • ¿¿Será por la gran imaginación que tiene Andy??
  • ¿¿Será porque nos recuerda nuestra niñez??
  • ¿¿Será que todos tenemos dentro de nosotros un niño?? Sin importar la edad.
  • ¿¿Será por añorar?? 
  • o Simplemente será porque si, así sin grandes complicaciones. 


Lo único que sé es que me gustan las películas, aunque en ocasiones juego a que me cuestiono mil cosas o incongruencias, al final me encanta porque si no fuera por esas incongruencias la película simplemente no existiría. 
Me encanta Toy Story, me encanta que a mi hijo le encante, me fascina verlo mover a su Buzz como si volara en el aire, me vuelve loquita ver la película tantas veces, aprendo los diálogos e incluso estando sensible me hace llorar la triste historia de Jessy en la segunda parte y no puedo evitar derramar lagrimas cuando los juguetes están a punto de morir quemados, y más aun cuando la mamá de Andy le dice que lo va a extrañar cuando se vaya a la Universidad y aunque sé que es un momento que aun va a tardar en llegar, no puedo evitar sentir un gran nudo en la garganta. 

Hay muchas cosas que me gustan de Toy Story, de hecho me gustan más la 2 y la 3, la uno no me gusta por el niño Sid que no se me hace un buen ejemplo para los niños, sin embargo me encanta la amistad de Woody con Buzz. Me gusta mucho que sean juguetes y que quieran que jueguen con ellos, he pensado muchas veces que hay juguetes que podrían huir de las casas porque no quieren que jueguen con ellos, tal vez por eso se me perdían tantos juguetes cuando era niña, jajaja. 

Al final estoy muy agradecida porque existan estás películas y que mi hijo tenga acceso a ellas. Disfruto sus grititos de "Boooz"... por que eso si, prefiere intentar decir Buzz que Mamá, pero esa es otra historia, la historia que me gusta es cuando me pide una película y me dice "Boooz" y entonces yo le pregunto, cuál mi amor... y entonces el toma sus juguetes y me dice cual quiere, si quiere la 1 agarra a Buzz y Woody y los pone encima de un carro, sea grande o sea chico, o los pone uno encima de otro y hace como si volaran, pero si quiere la 2 agarra a Tiro al Blanco y pone encima a Buzz y a Woody, pero si quiere la 3 entonces busca a Lotso y me lo enseña para que yo sepa que quiere esa película. 

Ya había visto las películas, pero no las había disfrutado como las disfruto ahora, ver la emoción de mi hijo cuando algo bueno pasa, o verlo taparse los ojos cuando en Toy Story 3 pasan la escena en la que los juguetes van a morir quemados y sus manitas se mueven rápidamente para cubrir sus ojitos, también cuando me pide que le adelante la escena de la guardería, cuando los juguetes están en el salón orugas, exactamente cuando los niños agarran a los juguetes y comienzan a maltratarlos, mi Leo no soporta ver eso, así que toma el control remoto y me pide que adelante la escena. Es algo sensible mi niño. Pero cada momento, cada etapa que vivimos junto a Toy Story es magnifica. Ahora le hemos colocado algunos posters en su cuarto y le preguntamos por algún personaje para que él nos lo señale con su manita, ya los identifica a todos y nosotros encantados con estas películas, con los juguetes y con la diversión y felicidad que compartimos con nuestro hijo. 

Les agradezco a todos por leer y por aguantarme en mis momentos tristes, en mis momentos felices, en mis momentos de angustia y desesperación, gracias por apoyarme y por sus consejos, gracias a mis amigas virtuales-tuiteras que se han convertido en un gran apoyo, compañía y lo mejor que han llevado nuestra amistad a la realidad. Gracias a todos. Saludos y un beso. 

jueves, 28 de julio de 2011

¿¿¿Retrocediendo???

En ocasiones cuando pienso que todo va perfecto con mi hijo, siento que retrocedemos, no sé si alguno de ustedes a sentido eso, igual y sus hijos únicamente van hacia adelante, tal vez no estamos retrocediendo, aunque pareciera que si, todo tiene un proceso y aunque al principio quisimos seguir algunas "normas" y otras "reglas", al final nos dimos cuenta que lo mejor era eso, ser pacientes y darle su espacio a nuestro hijo y de esa forma permitir que se desarrollara en su tiempo y en su espacio, sin embargo tampoco quiere decir que le abandonamos, al contrario ha tenido la estimulación desde los 6 meses de vida aproximadamente y podemos decir que en general nos encontramos muy contento con cada logro de nuestro hijo, sin embargo existen algunas cosas de las cuales no me gusta mucho hablar y es precisamente de eso, de hablar de lo que les estoy hablando...

Hace algún tiempo me encontraba muy contenta con las palabras que decía mi hijo, de hecho publique sus primeras palabras en la entrada: Las palabras de Leo, estaba en verdad encantada y vuelta loca, aunque después Leo ya no quiso seguir aumentando las palabras, es complicado porque la mayoría de la gente me culpa a mi, me dicen que yo paso todo el día con él y que le adivino todo que por eso él no habla, la verdad esa es una de las razones por las cuales me cuesta mucho escribir últimamente, sobre todo porque hay otros blogs en los que cuentan muchos logros de sus hijos y algunos niños más chicos que mi hijo y ya hablan, pero él nada más ya NO quiere hablar, no es que no diga nada, pero me cuesta mucho que lo haga. 

Llego un momento en el que Leo me llamo Mamá, fue uno de los momentos más hermosos, escuchar esa palabrita salir de su boca fue lo máximo, recuerdo que hasta derrame unas lagrimas y tal vez fue más mi éxtasis por el hecho de que ya casi no hablaba en ese entonces, de hecho me cuesta tanto trabajo que hable, si quiere leche y yo lo sé, me doy cuenta, es la hora en que toma, etc., no se la doy, entonces él va, me toma de la mano y me lleva a su sillón, donde acostumbra tomar su leche, si le digo que no entiendo que es lo que quiere él se levanta agarra la mamila y me la da en la mano, le he puesto las mamilas en un lugar no tan accesible para él, pero lo conoce, así que va por su banquito, se sube, toma la mamila y me la lleva hasta donde este para que se la de, a veces aun así, suelo fingir que no tengo idea de lo que me habla, entonces se pone a llorar para que yo le de su leche, tampoco me gusta que llore, pocas veces termina diciéndome "leche", la mayoría de las veces suelo ir a la cocina y le preparo su leche, así es con todo, si quiere comer, va abre el refrigerador y me señala lo que quiere, si quiere nieve abre el congelador y me señala el sabor, si tiene sed lo mismo, en general dice muy pocas palabras, Mamá ni soñando me vuelve a decir, Papá si dice, igual Tía y a su Abuela le dice Ba, sin embargo es todo, suele decir que quiere una película, si quiere una de Toy Story entonces dice Buzz, que eso si lo sabe decir, pero por ejemplo si quiere ver Kung Fu Panda, entonces me señala la montaña de DVD's y empieza a mover sus manitas como si fuera Po haciendo karate, en ocasiones cuando se emociona por algo dice "avo", como bravo y comienza a aplaudir, también les habla a los perritos y les dice gua-guas, ahora mismo tiene 2 años y siento que cada día quiere hablar menos.

Lo que hemos hecho: hablo mucho con él, la gente me critica, recuerdo que le compramos un micrófono que tenía eco y lo que hacía era que se sentían las vibraciones de su propia voz, desde pequeño le hablaba y muy bebé le ponía de igual forma sus manitas en mis labios para que sintiera las vibraciones de mi boca, le contamos cuentos, le hablamos todo el tiempo, le decimos que repita algo, pero no quiere, no le gusta, sigo hablando con él, ahora le explico que es mejor que hable para que yo pueda entender lo que él quiere y de esta forma él podrá obtener lo que quiere sin llorar o hacer berrinche, pero se niega a hacerlo. 
Hay una teoría de mi esposo, como saben y ya lo he platicado, poco después de que mi hijo cumplió 5 meses su abuela paterna falleció, mi esposo siempre ha tenido la teoría de que nuestro hijo veía a su mamá, ya saben como cuando se ríe sin motivo alguno, señala a alguien y le sonríe, cosas por el estilo, de hecho cuando comenzó a hablar también hablaba con alguien a solas, cuando mi esposo le preguntaba si estaba hablando con su abuela Meche, siempre se sonreía y decía "Shi", su forma de decir que SI, así que siempre manejamos esa teoría de que mi hijo veía a su abuela muerta, pero ahora mi esposo dice que su mamá no deja que mi hijo hable, y ya hasta ha intentado hablar con ella, le dice: "Mamá por favor necesitamos que Leo hable, ya déjalo hablar", pero no parece entender, jajaja, claro no es que yo crea en esa teoría pero hace poco alguien me comento algo parecido y yo lo que menos quiero es que mi hijo tenga problemas por no hablar, dentro de poco tiempo entrará a la escuela y espero que eso lo ayude para que él comience a soltarse, porque hay cosas que dice y otras no, por ejemplo no puede evitar gritar "Dish" cada que ve el logo de Disney, pues en verdad no tenga la menor idea si mi hijo este retrocediendo, si este influyendo su abuela paterna, si es una etapa normal, si es un niño raro... tampoco tengo la menor idea si es momento de llevarlo con un especialista, si será muy pronto, si se sentirá presionado, son tantas preguntas y tantos miedos... 

Por el momento hemos optado por esperar a que entre a la escuela, ver si tiene avances, observar sus logros, platicar con las maestras para saber si en la escuela habla, o detalles por el estilo. Al final queremos lo mejor para nuestro hijo y aun con criticas y presiones queremos igual darle su tiempo. 

A ver que pasa. Ya les platicaré... Gracias por leer. Un beso. 

viernes, 15 de julio de 2011

Un hermoso regalo para Mamá....

Hoy mi hijo cumple 2 años y podría enumerar los muchos regalos que me ha hecho a lo largo de estos 2 años, sin embargo no quiero aburrirlos o empalagarlos con tanto amor, así que sólo les contaré los 2  últimos regalos que me ha dado, el primero es maravilloso, igual que el segundo, pero es algo que no me lo esperaba, el segundo regalo me lo dio el día de hoy, después de que nunca me quería dar besos, llego, me abrazo y me dio un hermoso beso en el cachete, la verdad fue maravillosamente fantástico, tal vez ustedes tengan niños cariñosos y desde más pequeños lo hagan, pero para un niño como mi hijo que no es así es un logro enorme y yo estoy mega feliz. 

El otro regalo ya lleva 5 días para ser exactos, yo sé que hay niños que ya no piden mamila o pecho por las noches desde los 3 meses, otros a los 6, a los 9 a los 12 o algo así, sin embargo mi Leito se seguía despertando todas las noches para pedir su lechita, me dijeron muchas cosas y me llenaban de dudas, las cosas que más me decían eran referente a dejarlo llorar... "No le des nada, que llore y se va a cansar de llorar, después de 3 ó 5 días dejará de llorar y se acostumbrara a no pedir la leche", o bien me decían "Dale agua, ya no le des leche, aunque llore y después dejará de pedirte".... los comentarios todos parecidos iban en el mismo rumbo, déjalo llorar, pero luego pensaba en lo que sentiría mi pequeñito y un día alguien también me dijo: "Debemos amar y respetar a nuestros hijos, son muy pequeños y deben confiar al menos en sus padres", esa idea rondaba mi cabeza, leí libros que hablaban de que los niños dejaran de pedir mamila al año y también que dejaran la mamila o el pecho por completo, pero me preocupaban otras muchas cosas. Nuestra situación de vida nos llevo a seguir despertándonos cada madrugada para alimentar a nuestro cachorrito... mientras pensaba "con que no siga así hasta los 5 años todo esta bien" también me angustiaba pero me tranquilizaba el pensar que estaba respetando a mi hijo y dándole su tiempo... finalmente el día llego, desde el domingo no se ha despertado para pedir leche, de repente se despierta y se inquieta pero no pide leche, pensamos que todavía puede pedir, tal vez un día o algo así, pero ahora mismo lleva 5 días sin pedir leche y estamos felices, como ya dije, lo respetamos, le dimos su tiempo y al final el decidió y su cuerpo también le indicó el momento para hacerlo. El siguiente paso es que deje la mamila porque toma en vaso lo que sea, jugo, agua, licuado, pero la leche sola la quiere seguir tomando en la mamila, ni en vasito entrenador quiere, así que ya veremos como le va con eso. Por lo pronto mi sueño se lo agradece enormemente. :)

Esos son mis regalos de estos dos años que llevo como mamá, aunque siento que es más tiempo, tal vez por el tiempo de espera y el deseo de ser madre, sólo puedo decir que ha sido maravilloso. 

Muchas gracias por leer y por compartir, gracias a todas las #mamastuiteras que me han guiado, ayudado, compartido, orientado e incluso hasta regañado en estos dos increíbles años. 

Un beso. 

jueves, 14 de julio de 2011

Entrando a los terribles 2

No es que ya hayan iniciado, digo hasta mañana cumple 2, así que no tengo idea de como funcione esto, será que se activa un botón interno y el día de mañana empezaré a sufrir con el comportamiento de mi hijo, dicen que los terribles 2 incluyen la desobediencia y la rebeldía, también que son parecido a lo que algún día nos harán sufrir como adolescentes, y es ahí cuando siento que no puedo, no hay un botón, no es algo automático, lo sé, sin embargo también sé que puede ser que esos terribles 2 ya hayan iniciado, y si no han iniciado, no quiero ni pensar lo que me espera.

Todos los que me siguen saben que hemos tenido varias dificultades y problemas con la desobediencia de nuestro hijo, sin embargo todos los días tratamos de que nuestros actos sean por el bienestar de nuestro hijo. Esto claro incluye, en nuestra visión, un niño obediente y no berrinchudo. La información sobre los terribles dos es muy variada, en realidad hay autores que indican los terribles 2 inician después del año de vida y depende del desarrollo y maduración de cada niño, pero sin duda alguna se empieza a dar un comportamiento diferente, nuestros hijos, como el mío claro, son el centro de atención, son el centro de nuestra vida y ellos lo saben, saben que el mundo gira en torno a ellos, al menos hasta ese momento así lo creen, han aprendido que llorando obtienen nuestra atención, obtienen alimentos, cobija, abrigo, incluso amor, así que por esa razón y al no poder comunicarse todavía por completo con el mundo, empiezan con este comportamiento, también porque no están dispuestos a dejar los privilegios que hasta el momento han tenido, es entonces cuando inicia la lucha de poderes y eso trae consigo momentos embarazosos y vergonzosos para nosotros. 

No es por presumir pero Leonardo parece ser un niño bien portado en casa, hasta obediente, claro que tiene sus días, momentos en los que no quiere levantar sus juguetes, no quiere comer, no quiere dormir, no quiere bañarse, etc., etc., sin embargo en general me tiene muy contenta, me hace muy feliz, con una sonrisa, con una caricia, con una mirada, hasta verlo respirar me hace inmensamente feliz, tal vez mi hijo lo sabe y por eso abusa de eso, no me gustaba creer eso, pero así es, he escuchado muchas veces esas frases que indican que los hijos siempre nos hacen quedar mal, que en público se comportan diferente que en casa, así es mi vida ahora.... y no me quejo porque sé que es parte del aprendizaje, parte del viaje que decidimos emprender hace casi 3 años, que nos llevo a prepararnos, a esperarlo, a recibirlo y a amarlo cada instante de nuestra vida. 

La verdad estos dos años han sido maravillosos, llenos de ratos agradables, graciosos, tristes, no han faltado las enfermedades, el sufrimiento de las vacunas, alguna caída, las alegrías de escuchar cada palabra, el orgullo del gateo, de los primeros pasos, las desveladas, las sonrisas, los besos, los abrazos, las caricias, los juegos, los brincos, las carcajadas, las salidas, todo, no acabaría de enumerar cada satisfacción que me da el ser madre y por supuesto que hablo por mi esposo, el ser padres es maravilloso, como ya lo he dicho, es más agotador que trabajar 12 horas en una oficina y me ha dado por supuesto más felicidad... 

¿Tengo que pasar por los terribles 2, por la desobediencia, por los berrinches... a fin de disfrutar de todo lo que he disfrutado? Creo que la respuesta es SI, tengo que hacerlo y aunque en ocasiones me sienta traumada, agotada, preocupada, angustiada, etc., por el comportamiento de mi hijo, al final sé que no es un trabajo fácil, pero bien dicen, Dios no te da más peso del que puedas cargar, y mi hijo no es ningún peso (aunque ya tiene casi 15 kilos) y sé que puedo con esta tarea, me sigo preparando cada día y sigo aprendiendo... 

Así que terribles 2 sean bien recibidos.... 

Gracias por leer.