Que padre tema el de esta semana, lleno sin lugar a dudas de cosas que decir, y por lo mismo me cuesta tanto y tanto trabajo encontrar un punto para iniciar, me hice madre hace casi 7 años, aunque no sé si me he ganado el titulo, no estoy segura si nos lo ganamos con el simple hecho de parir o en realidad en el camino de la maternidad, algunos dicen que es fácil ser madre y otras decimos que es medio complicado, de lo único que estoy segura es de que es hermoso, es hermoso tener una pequeña criatura en tus brazos, es hermoso darte cuenta que forma parte de ti, que tiene tus ojos, o tus manos, o tu sonrisa, o tu carácter o tu cabello o bien tiene todo de la persona que amas, que al final es el resultado perfecto, la mezcla idónea, y no sabes que hacer, al ser madre te das cuenta que no sabes ser madre, que todos los libros que te leíste, las revistas que te regalaron en las mesas de regalos que abriste, las platicas que tuviste con otras mujeres todo eso no sirve para nada, porque tu hijo es único y no sabes como cuidarlo, pero lo único que quieres es protegerlo y que sepa que estas intentando cada día ser una buena madre para él y que cada uno de los actos que haces es con el afán de que esté bien y que sea feliz, tienes que aprender a aceptar consejos, a dar el avión, a decir que si pero conectarte con tu instinto de madre e intentar hacerlo mejor, al ser madre aprendí que puedes ser muy feliz con una sonrisa, que una temperatura puede mantenerte despierta aunque lleves dos días sin dormir, aprendí que puedes tener mil excusas para no querer levantarte de la cama, pero que un simple "mamá" salido de la boca del ser al que le diste vida te puede hacer levantarte en el acto, aprendí lo fuerte que de verdad puedo ser, al ser madre aprendí que no todas nacimos para ser madres, es triste esta parte pero así lo creo también, no por ser mujeres y tener un vientre estamos todas preparadas, y no lo digo por mí, soy la más feliz del mundo, tampoco quiero juzgar, pero me di cuenta que en ese entonces mi hijo era mi mundo y ahora mis dos niños son TODO para mí, que sigo amando a mi esposo pero que es diferente, pero también me dí cuenta de que me hubiera gustado tener una mamá como yo (y sé que no soy perfecta y puede sonar vanidoso, pero de mínimo me hubiera gustado eso), es muy feo, pero es verdad, al ser madre, me dí cuenta de mil cosas, pero esta es una de las cosas que más me pesa y más que al convertirme en madre y dudar de mí, dudar de si podría hacerlo porque me dí cuenta que no es una labor fácil, porque por momentos quería regresar al trabajo, porque sentía que era demasiada responsabilidad y no lograría hacerlo, pero después de que me dijeran "me hubiera gustado tener una mamá como tú (de boca de mis hermanos)" mi vida comenzó a cambiar y me dí cuenta que era cierto que yo también hubiera querido eso, una mamá presente y diferente, mi vida es feliz mucho, pero no voy a mentir, es fuerte, pero esa es una de las cosas que aprendí al convertirme en madre, y esta súper mal que lo diga y está peor que lo sienta, y espero mis hijos no me juzguen, quiero a mi mamá, es una buena abuela, pero al final es cierto que uno aprende de sus propios errores y también de los errores de los demás, por lo mismo les doy todo a mis hijos sin esperar nada a cambio.
Mil gracias por leer y por seguir el #AmomiBlog.
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